Día de playa
Básicamente es invierno aquí en Ecuador, pero eso no me detuvo de pasar el fin de semana en la playa. Para ser honesta, se me había olvidado lo frío que puede llegar a estar cuando sopla el viento y encima hay lluvia y llovizna (que no paró en todo el fin de semana).
Así que mis bikinis se quedaron tristes y solitos en la maleta, mientras que mi suéter estilo abuelita irlandesa fue el protagonista del fin de semana. Algunas personas, menos prácticas que yo, igual intentaron meterse al agua, pero se veían bastante miserables saliendo temblando y morados. Un bañista en particular me dejó pensando. No quiero avergonzar a nadie por su cuerpo ni nada por el estilo, pero un hombre que fácilmente podría ser luchador de sumo estaba feliz de la vida usando nada más que un hilo dental. Fue…bueno…fue todo un look. Ni siquiera sabía que algo así se podía comprar. Pero bueno, cada quien con lo suyo, etcétera etcétera.
A pesar del clima poco ideal para nadar, disfruté muchísimo la playa con mis hijos. En esta playa en particular había cientos de cangrejitos que salían y entraban de sus agujeros. Me pasé la mayor parte de la tarde corriendo por la orilla tratando de atraparlos. Dato curioso: uno de mis talentos ocultos es atrapar cangrejos (sin que me pellizquen). Hay que acercarse sigilosamente si quieres tener alguna oportunidad. Mi hijo menor, sin embargo, no entiende el concepto de sigilo y corría directo hacia ellos gritando “¡cangrejo! ¡te atrapo!”. Tierno, sí. Sigiloso, no tanto. Pero logré atrapar varios, y uno incluso me dejó volver a levantarlo después de soltarlo. O entendió que no le iba a hacer daño, o quedó tan traumatizado por el encuentro humano que se congeló del susto. Quiero pensar que reconoció mi buena intención. Como se dejó agarrar sin protestar, llamé a mis hijos y cada uno lo tocó suavemente antes de salir corriendo entre risas.
No hay una gran lección ni reflexión profunda en este post.
Solo cangrejos, lluvia, y un hilo dental que ojalá pueda borrar de mi memoria.
Tal vez solo esta: revisa el pronóstico del clima antes de ir a la playa.
Hasta la próxima.
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