Conejitos dormilones

Esta mañana mis hijos estaban durmiendo un poco más de lo normal. Entré en su cuarto para despertarlos y que se alistaran para la escuela, pero tuve que detenerme y sentarme en el borde de la cama a mirarlos un rato. Mi hijo mayor se había metido en la cama con el pequeño y estaban acurrucados como dos conejitos. Me asombra cómo pueden ser tan diferentes y, sin embargo, cada uno perfecto a su manera.

Fue tan pacífico mirarlos —sus pequeñas barriguitas subiendo y bajando con la respiración, completamente seguros, completamente cómodos. Quise embotellar ese momento para guardarlo para un día gris. Pero supongo que mucho de lo que hago con este blog es justamente eso, ¿no? Te cuento estas pequeñas cosas y es lo más parecido que tengo a guardar todo lo bueno.

Mientras los miraba, pensaba en lo agradecida que estoy de poder hacerlos sentir seguros, queridos y felices. Quiero que su pequeño mundo sea mágico. A veces fallo en esto, sobre todo cuando me siento estresada (lo cual pasa más de lo que quisiera), pero lo intento, y quiero intentarlo aún más.

En realidad, pensaba que, en general, sentiré que he tenido una vida exitosa si las personas con las que tengo la oportunidad de cruzarme se sienten seguras y apoyadas. No soy tan fuerte como para defender a alguien de un oso (aunque quién sabe lo que puede hacer la adrenalina…), pero sí puedo hacer que alguien se sienta seguro conmigo. Creo que lo que quiero decir es que quiero ser consciente de ser confiable, empática, solidaria, y en general un refugio seguro. Espero que tú, que estás leyendo esto, te sientas seguro —aquí conmigo, y en todos los rincones de tu vida.

Bueno, solo necesitaba un pequeño descanso mental y esto salió de repente. Uf, tal vez un poco más profundo de lo que pensé que tenía dentro en este momento. Esta tarde llega mi tan esperado mueblecito y estoy emocionadísima. ¡Sé que no puedes esperar a ver cómo queda! (Sarcasmo, sé que a nadie le importa, pero probablemente mañana comparta una foto porque estoy demasiado contenta).

Hasta la próxima.